El Club de las Palabras Desnudas

Cada día es uno nuevo, pero quedan los restos de lo viejo en cada uno. Van tirados, como las piedras y la basura. Lo que no sirve se desecha, lo que aun es útil se recicla. Cada día es uno nuevo, pero cada día tenemos algo que guardar o botar, cuanto queda en nuestra alma, cuanto queda en nuestros corazones, solo lo necesario para cada uno sentirse humano.

Han quedado las heridas ya cerradas, tristezas ateridas y aterradas, olvide el antiguo camino, las vendas quedaron regadas manchadas del recuerdo obtuvo el día descanso con cada cansado placer que muerdo concuerdo que todo es nuevo en esta avenida ya sea mía o del andar del transitar de las palabras con las que duermo desnudas simples y mudas ellas solo placen no hay esquirlas el sangrar ya no es necesario  para sentirlas solo languidece un poco cada día mi antigüedad sombría ahora solo refrescos bebe intentando poder ser feliz de nuevo ser feliz de nuevo de nuevo nuevo.

El camino ha terminado. Por este año. Al siguiente tendremos oportunidad de empezar de nuevo, en cierta forma. Vamos con las esperanzas en la punta de los dedos, de las palabras. Oyendo el nuevo disco de Lírico, aquí sentado ante el trabajo que cansa. Son las circunstancias las que me trajeron a esta vida que he vivido, por todo lo bebido herido. Hoy somos pocos, como las oportunidades. Somos los que estamos al lado del camino dicen. En realidad creo que somos las huellas de lo andado, somos el camino. Los errores. La experiencia. Las lagrimas. La alegría de cada nuevo día. Aun con melancolía. He dejado atrás lo que me ataba a una vida que ya no era mía. He dejado los días que aun herían. Ya fue ya. Mi ayer ya va. La crisis ha quedado, moribunda. Cuando llegue el día 30 falaz. Podré matarlo en paz. Espero que oyendo algún sample de jazz.